En un entorno de indudable belleza natural y geológica se sitúa la laguna de la Posadilla. Alojada en el cráter del volcán de Fuentillejo, es una de las abundantes lagunas de origen volcánico que pueblan el Campo de Calatrava. Se formó hace más de un millón de años, cuando el contacto entre el magma y las aguas subterráneas provocó una explosión de gran magnitud, formando lo que se denomina un maar (de unos 500 metros de diámetro), donde se asienta la laguna. Esta formación y su laguna se encuentran protegidas con la categoría de Monumento Natural.
Ya de por sí, el lugar donde se ubica la Posadilla es de gran encanto, ya que se unen varios aspectos de interés: el agua, la vegetación que rodea el vaso lagunar (típica de bosque mediterraneo), el monte, los peñascos, el cráter de gran tamaño y la presencia de aves acuáticas. Pero si además conocemos las causas de la formación de semejante agujero en el terreno, realmente nos sorprenderá el lugar, y podremos hacernos una idea de las dimensiones que pudo alcanzar la erupción que formó este paisaje, uno de los muchos maares que pueblan el volcánico Campo de Calatrava.
Precisamente, creo que la visita a este precioso entorno queda incompleta si no se conoce su génesis, además de que pienso que es uno de los mayores atractivos de este Monumento Natural. Así que voy a explicar brevemente y de forma sencilla su formación. La historia geológica de esta laguna, como hemos visto, se remonta un millón de años atrás (parece mucho, pero en términos geológicos hablamos de un pasado relativamente reciente). El volcán de Fuentillejo, tuvo una primera fase de erupción de tipo estromboliano (emisión de bombas y coladas de lava). En este tipo de erupciones prima la emisión de magma, cuya acumulación en capas sucesivas da lugar a la típica forma cónica de un volcán. A esta erupción siguió otra de tipo hidromagmática, cuya explosión de gran violencia destruyó el cono del volcán dando lugar al maar que observamos en la actualidad. Este otro tipo de erupciones tiene lugar cuando el magma, durante su ascenso hacia la superficie, entra en contacto con aguas subterráneas de acuíferos bajo la corteza. Esto provoca la generación de vapores e incrementa la presión interna lo que genera explosiones y erupciones muchísimo mas violentas. Para haceros una idea, es como el efecto de una olla exprés del tamaño de un buque, que estallara. Pues eso, pero a lo bestia...
Pues bien, semejante explosión lanzó por los aires parte del cono volcánico que se había formado y dejó un pedazo de cráter de 500 metros de diametro que es lo que podemos ver en la actualidad. A este tipo de cráteres, que suelen ser de escaso relieve, se les denomina maares (no, no está mal escrito: maar con dos "a"). Suelen estar rodeados de un anillo de piroclastos (rocas y restos de lava lanzados durante la erupción).
Durante la visita al volcán, además del maar donde se asienta la laguna, podremos contemplar numerosas bombas volcánicas y otros piroclastos. Una bomba es una porción de lava de dimensiones variables (desde algunos centímetros a más de un metro de eje) que es emitida durante la erupción volcánica. Durante su vuelo, puede girar y adoptar formas redondeadas, que es la que usualmente tienen, si la lava aún está a suficiente temperatura y es maleable.
En fin, espero que esta breve clase de geología no se os haya hecho pesada, pero creo que es importante conocer el origen de lo que tenemos delante. Así pues, semejante agujero en el terreno, sirve para que se acumule agua de forma natural, como ocurre en las numerosas lagunas ubicadas en maares que tenemos en el Campo de Calatrava, donde casi toda laguna que encontramos está alojada en cráteres de este tipo. Ejemplos hay muchos: La laguna del Prado (Pozuelo de Calatrava), la laguna de Peñarroya (cerca de Alcolea), la laguna de Caracuel, la de la Hoya de Cervera (Almagro), la Alberquilla (Mestanza), y un largo etcétera.
Los volcanes son un patrimonio geológico único que tenemos en La Mancha y que en mi opinión, es bastante desconocido e ignorado. Prácticamente toda la comarca del Campo de Calatrava está plagada de elementos volcánicos, que si se saben ver e interpretar, podrían ser de gran potencial para la zona. Ya en este blog, hemos hablado de algunos de estos lugares. Lo más parecido y cercano que tenemos en la península en cuanto a volcanes, tendríamos que ir a verlo a la comarca de "La Garrotxa", en Gerona.
Volviendo a la laguna de la Posadilla, en el entorno natural y protegido donde se encuentra la laguna, podemos encontrar vegetación típica de monte mediterráneo y diversas especies de aves acuáticas. Hay numerosos maares en el Campo de Calatrava y muchos son muy hermosos, pero la combinación de monte, maar y laguna hacen de La Posadilla un lugar especialmente bello y singular; uno de los entornos naturales más bonitos dentro del término municipal de Ciudad Real y que bien merece un sosegado paseo para disfrutarlo.
La forma más sencilla de llegar es desde Valverde, siguiendo un camino hasta las inmediaciones de la laguna. Hay un ramal señalizado del GR-114 (Camino Natural del Guadiana) y de la Ruta de Don Quijote que llegan desde el pueblo hasta allí. Una vez allí, hay que subir a pie hasta la parte alta del cráter, recorriendo unos 700 metros por la parte Oeste de la laguna, desde donde se tiene una preciosa panorámica del entorno. Se recomienda el uso de prismáticos para disfrutar de las aves y el paisaje. Si se desea, se puede seguir ascendiendo por el sendero unos cientos de metros más, hasta la zona más alta de los peñascos del Sur, desde donde también se tienen muy buenas vistas.
Actualmente, la laguna es de propiedad particular y se encuentra vallada desde diciembre de 2014, no pudiendo internarse en el cráter, aunque sí que hay un sendero junto a la valla que permite subir hasta la parte alta del cráter desde donde se ve todo el entorno, haciendo el recorrido a pie que he descrito antes.
Ya de por sí, el lugar donde se ubica la Posadilla es de gran encanto, ya que se unen varios aspectos de interés: el agua, la vegetación que rodea el vaso lagunar (típica de bosque mediterraneo), el monte, los peñascos, el cráter de gran tamaño y la presencia de aves acuáticas. Pero si además conocemos las causas de la formación de semejante agujero en el terreno, realmente nos sorprenderá el lugar, y podremos hacernos una idea de las dimensiones que pudo alcanzar la erupción que formó este paisaje, uno de los muchos maares que pueblan el volcánico Campo de Calatrava.
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| Laguna de la Posadilla. Aunque desde aquí parezca pequeña, son unos 300 metros de diámetro. Se asienta en el fondo de un cráter de unos 500 metros de diámetro y unos 60 de profundidad. |
Precisamente, creo que la visita a este precioso entorno queda incompleta si no se conoce su génesis, además de que pienso que es uno de los mayores atractivos de este Monumento Natural. Así que voy a explicar brevemente y de forma sencilla su formación. La historia geológica de esta laguna, como hemos visto, se remonta un millón de años atrás (parece mucho, pero en términos geológicos hablamos de un pasado relativamente reciente). El volcán de Fuentillejo, tuvo una primera fase de erupción de tipo estromboliano (emisión de bombas y coladas de lava). En este tipo de erupciones prima la emisión de magma, cuya acumulación en capas sucesivas da lugar a la típica forma cónica de un volcán. A esta erupción siguió otra de tipo hidromagmática, cuya explosión de gran violencia destruyó el cono del volcán dando lugar al maar que observamos en la actualidad. Este otro tipo de erupciones tiene lugar cuando el magma, durante su ascenso hacia la superficie, entra en contacto con aguas subterráneas de acuíferos bajo la corteza. Esto provoca la generación de vapores e incrementa la presión interna lo que genera explosiones y erupciones muchísimo mas violentas. Para haceros una idea, es como el efecto de una olla exprés del tamaño de un buque, que estallara. Pues eso, pero a lo bestia...
Pues bien, semejante explosión lanzó por los aires parte del cono volcánico que se había formado y dejó un pedazo de cráter de 500 metros de diametro que es lo que podemos ver en la actualidad. A este tipo de cráteres, que suelen ser de escaso relieve, se les denomina maares (no, no está mal escrito: maar con dos "a"). Suelen estar rodeados de un anillo de piroclastos (rocas y restos de lava lanzados durante la erupción).
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| Esquema de erupción hidromagmática 1. Pluma de vapor de agua 2. Chimenea volcánica 3. Estratos de lava y ceniza 4. Estrato geológico 5. Agua subterránea 6. Lugar donde se producirá la explosión 7. Cámara magmática |
Durante la visita al volcán, además del maar donde se asienta la laguna, podremos contemplar numerosas bombas volcánicas y otros piroclastos. Una bomba es una porción de lava de dimensiones variables (desde algunos centímetros a más de un metro de eje) que es emitida durante la erupción volcánica. Durante su vuelo, puede girar y adoptar formas redondeadas, que es la que usualmente tienen, si la lava aún está a suficiente temperatura y es maleable.
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| Laguna seca: Es su aspecto habitual en verano. |
Los volcanes son un patrimonio geológico único que tenemos en La Mancha y que en mi opinión, es bastante desconocido e ignorado. Prácticamente toda la comarca del Campo de Calatrava está plagada de elementos volcánicos, que si se saben ver e interpretar, podrían ser de gran potencial para la zona. Ya en este blog, hemos hablado de algunos de estos lugares. Lo más parecido y cercano que tenemos en la península en cuanto a volcanes, tendríamos que ir a verlo a la comarca de "La Garrotxa", en Gerona.
Volviendo a la laguna de la Posadilla, en el entorno natural y protegido donde se encuentra la laguna, podemos encontrar vegetación típica de monte mediterráneo y diversas especies de aves acuáticas. Hay numerosos maares en el Campo de Calatrava y muchos son muy hermosos, pero la combinación de monte, maar y laguna hacen de La Posadilla un lugar especialmente bello y singular; uno de los entornos naturales más bonitos dentro del término municipal de Ciudad Real y que bien merece un sosegado paseo para disfrutarlo.
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| Relajante solaz con vistas a la laguna |
La forma más sencilla de llegar es desde Valverde, siguiendo un camino hasta las inmediaciones de la laguna. Hay un ramal señalizado del GR-114 (Camino Natural del Guadiana) y de la Ruta de Don Quijote que llegan desde el pueblo hasta allí. Una vez allí, hay que subir a pie hasta la parte alta del cráter, recorriendo unos 700 metros por la parte Oeste de la laguna, desde donde se tiene una preciosa panorámica del entorno. Se recomienda el uso de prismáticos para disfrutar de las aves y el paisaje. Si se desea, se puede seguir ascendiendo por el sendero unos cientos de metros más, hasta la zona más alta de los peñascos del Sur, desde donde también se tienen muy buenas vistas.
Actualmente, la laguna es de propiedad particular y se encuentra vallada desde diciembre de 2014, no pudiendo internarse en el cráter, aunque sí que hay un sendero junto a la valla que permite subir hasta la parte alta del cráter desde donde se ve todo el entorno, haciendo el recorrido a pie que he descrito antes.
----- MAPA -----
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