Las Virtudes

A pocos kilómetros de Santa Cruz de Mudela se encuentra el santuario de Las Virtudes. El conjunto, formado por ermita y plaza de toros adyacente, fue declarado Monumento Histórico Nacional en 1981. Por su bonita arquitectura popular, es un lugar conocido en la La Mancha (aunque no mucho fuera de ella) que además alberga algún que otro reseñable detalle menos conocido, así que si tenéis interés, seguid leyendo.


Torre de la ermita y plaza de toros de Las Virtudes desde el centro del coso.





Pero vayamos por partes y centrémonos primero en la plaza de toros: Esta singular construcción está desarrollada como un único conjunto junto a la ermita como si de una plaza urbana se tratara, aunque convertible en coso taurino. Con el devenir de los años, el coso se debió hacer permanente, pero la estructura de la plaza perduró, de ahí su curiosa forma cuadrada, que la hacen una de las plazas de toros más peculiares de toda España.

Callejón y soportales

Detalle de capitel con inscripción


Si por si esto fuera poco, esta es una de las plazas de toros más antiguas de España (y por ende, del mundo) de las que aún se conservan en pie, cuando no la más antigua, pues algunas fuentes así lo afirman. Se estima su fecha de construcción a mediados del siglo XVII, allá por el año de 1641, como así queda atestiguado en el dintel de una de las puertas que dan al coso, aunque no existe documentación alguna que lo corrobore. En cualquier caso, su arquitectura es un buen ejemplo de construcción popular manchega de esa época, con soportales encolumnados, balconadas de madera, suelos empedrados, etc. La fachada anexa a la ermita, está compuesta por una hilera de columnas de piedra sobre el que se asientan los balcones de madera. En la fachada oeste del coso, los balcones cuelgan de la primera planta de una casa construida de mampostería, denominada "Casa de la Despensa". Bajo el balcón, la nombrada puerta construida en sillería, donde encontramos tallada la fecha de construcción (1641).

Casa de la Despensa: En su puerta, aparece la fecha de construcción.

Año de 1641

Coso: Parte opuesta a los soportales

Bajo los soportales. ¡Qué bonito!
Nos fijamos ahora en la ermita. Su interior nos aguarda con una sorpresa en forma de obra de arte, pues nos encontraremos con una techumbre mudéjar del siglo XV y con una decoración y pinturas barrocas en la capilla mayor y en el camarín que la convierten en una de las más destacadas joyas del barroco manchego. La construcción de la ermita se data en el siglo XIV, aunque se ha visto sometida a modificaciones posteriores. Se compone de una única nave, dividida en dos espacios: la propia nave central y el altar de construcción tardía (siglo XVIII). El altar cuenta con exquisita decoración y frescos barrocos. En el piso superior se encuentra el camarín también bellamente decorado.

Retablo barroco (Foto: ayeryhoyrevista.com)

Detalle de fresco en bóveda

Pero por si fuera poco, no todo acaba aquí. En el interior de la ermita también nos aguarda otra pieza única, esta vez más antigua. Para ello hay que dirigirse a la pila bautismal que hay en la parte trasera de la nave. La pila, es probablemente visigoda, pero se sustenta sobre un pilar muy especial: Se trata de un pulvino romano, el único hallado hasta ahora en la provincia de Ciudad RealLos pulvinos eran elementos ornamentales que los romanos colocaban sobre las tumbas monumentales. Vamos, que no se lo podía permitir cualquiera y que solamente estaban en grandes mausoleos o tumbas de personajes adinerados y de gran importancia, como altos funcionarios del estado o grandes militares. Son muy poco frecuentes en la región, y hasta ahora, en toda Castilla-La Mancha sólo se habían localizado en el parque arqueológico de Segóbriga (Cuenca) y en Ontur (Albacete). La presencia de este pulvino es una de las hipótesis en la que se sustentan los que sitúan en Las Virtudes la ciudad romana perdida de AD TVRRIS. En cualquier caso, este y otros vestigios indican un asentamiento, al menos, anterior a la Edad Media.

Pila bautismal bizantina: En color más claro, el PULVINO romano.

Este pulvino data del siglo I de nuestra era. Es un elemento cilíndrico, con hojas talladas y que era colocado sobre las grandes tumbas como elemento decorativo, en posición horizontal. Para reaprovecharlo como sustento de la pila, hubo que ponerlo en posición vertical.

Para que veáis un ejemplo práctico de lo que es un pulvino:
Tumba monumental romana reconstruida (British Museum)
Consta de pulvinos en su parte superior.
Se parecen bastante al de la pila bautismal ¿verdad?



Y para acabar, el recinto se rodea de una coqueta alameda y jardines con también algunos elementos de interés, como la fuente con pilar de piedra que podemos encontrar en estos jardines. Según podemos leer, tallado en la piedra, la fuente fue construida por orden de un tal "Juan Alfonso" en 1856.

Fuente, con inscripción tallada (1856)
Coquetos jardines en la alameda, con la ermita al fondo

Como veis, independientemente de si sois o no taurinos, el lugar bien merece una pausada visita para conocerlo y otorgarle un merecido un deleite a nuestros sentidos. Las Virtudes, por suerte, no es un lugar desconocido, pero sí que creo que, con los detalles que hemos visto en esta entrada, no le damos la importancia que se merece.

La provincia de Ciudad Real cuenta además con otros de estos peculiares conjuntos de ermita junto a plaza de toros: Santuarios de Virgen de las Nieves (en Almagro) y Virgen de la Carrasca (Villahermosa), pero esos, los dejamos para hablar de ellos más pausadamente, en mejor ocasión.

Las Virtudes: Exterior de la ermita

Y acabamos la entrada con el mapa habitual con la ubicación del lugar:

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Comentarios

  1. Precioso lugar que como veis, merece ser visitado. El entorno en sí parece un oasis en pleno secarral manchego.Os animo, no os defraudará.

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    1. Así es. Haced caso a Olaya e id a verlo, pues las fotos que hice no muestran más que una mínima parte del encanto del lugar.

      Gracias por tu comentario, Olaya.

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  2. Tal y como ha dicho Olaya, merece la pena visitar el lugar, aunque este resumen es muy bueno, agradezco que no haya puesto todo, pues así el posible viajero-turista se llevará más de una sorpresa agradable, ya que visitar el camarín de la Virgen no defrauda a nadie.

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    1. Camarín que es una de las joyas del barroco manchego y que aún no he podido visitar personalmente, pues ese día el encargado no estuvo por la labor de permitirme el paso. Así que ya tengo excusa para volver, aunque el resto ya bien merece la pena.

      Un placer leer tu comentario, Pepe. Gracias.

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