Cueva de los muñecos

En el término de Abenójar, junto al río Hojalora y justo antes de que llegue a desembocar en el Tirteafuera, la cueva de los muñecos constituye una de las mayores representaciones subterráneas con formaciones kársticas, dentro de la provincia de Ciudad Real. Cuenta con un recorrido de unos 800 metros (de los cuales unos 250 son relativamente accesibles), durante los cuales se puede apreciar las características formaciones que se dan en este tipo de cuevas: estalactitas, estalagmitas, columnas, etc.

La provincia de Ciudad Real, que yo recuerde, no tiene ninguna cueva natural de cierta importancia, entidad y dimensiones preparada para visitas turísticas. Y digo "cueva natural" porque para el que disfrute de los paseos subterráneos puede acercarse por el parque minero de Almadén, que además es Patrimonio de la Humanidad. Pero en cuanto a grandes cavidades naturales, Ciudad Real no es precisamente un lugar donde abunden, y mucho menos que sean visitables por un turista de los de cámara de fotos en ristre, bermudas floreadas y sandalias con calcetines.

Una vistosa columna en el interior de la cueva.

Y esta cueva de los muñecos no es una excepción, porque se trata de una cueva que no está preparada para el turismo, por su ubicación, por su acceso y por la visita a su interior. Expliquemos cada uno de estos puntos: La cueva se encuentra en su estado natural sin modificaciones que faciliten su acceso y exploración, aunque muy lejos de considerarla una "cueva virgen". Por su asequible recorrido, tristemente se ha visto sometida a numerosos expolios y destrozos por parte de desaprensivos, que han arrancado y robado estalactitas, hecho pintadas, depositado basura, etc. Vamos... que en algunas partes el aspecto es lamentable y el deterioro notable. Respecto a su ubicación, se halla perdida en el monte y para llegar a ella hay que hacerlo caminando varios kilómetros, además de que si no se conoce el terreno, conviene ayudarse de un GPS de montaña para localizar el punto exacto donde se ubica su entrada.

La visita se hace por tu cuenta y riesgo, y como tal, conviene tomar las debidas precauciones. Aunque si no se abandona el recorrido "sensato" y se explora con la suficiente cautela se puede hacer sin peligro. No presenta grandes desniveles o caídas verticales, pudiendo recorrerse a pie y erguidos prácticamente sin problema. No obstante, no tomar ciertas precauciones puede ser fatal. Una caída, un mal golpe con alguna roca o quedarse sin luz en el interior representaría un más que serio problema. Precaución ante todo.

Angosta puerta de acceso.
La entrada no da pistas de las grandes dimensiones interiores de la oquedad.

El acceso a la cueva se realiza a través de una puerta, que hace décadas adecuó el dueño de la finca. Nada más acceder, un pequeño "vestíbulo" nos espera, donde una placa rememora la visita de un grupo de espeleología. Un angosto pasillo se abre hacia el interior, donde nos recibe la primera columna de la cueva, presagio de lo que nos espera más adentro. Adentrándonos, el pasillo poco a poco se hace más alto, y por aquí nos encontraremos con los primeros inquilinos, grandes arañas y murciélagos que nos recuerdan dónde estamos.

Reluciente y gordo ejemplar de arácnido residente en la cueva.

El pasillo da acceso a una gran sala de unos 15x50 metros y con un fuerte desnivel descendente. La altura llega a alcanzar unos 10 metros. Es aquí donde ya se pueden vislumbrar las caprichosas figuras que el tiempo y el agua han modelado en esta cueva: Estalactitas, columnas, "cascadas" de piedra, etc. Lo lamentable es que los vándalos se han dedicado a saquearla, destrozarla, pintarla... Muchas de las piedras aparecen mutiladas por la mano del hombre. No obstante, el silencio, la oscuridad y la sensación de encontrarnos en un lugar especial merecen la pena. Algunas formaciones pétreas asemejan esculturas, lo que nos hace suponer que el nombre de la cueva viene dado por esas piedras como "muñecos". En esta gran sala, algunas zonas del techo están pobladas de murciélagos y el suelo cubierto de los excrementos de estos animales. Este tipo de estiércol, llamado murcielaguina, es uno de los más apreciados y era usado por agricultores de la zona como abono para sus campos, adentrándose en la cueva para recogerlo.

La primera columna que nos encontramos en el pasillo de entrada.

Otra bella formación, en la sala principal.
Se aprecian las estalactitas seccionadas por la acción humana.
Hay que ser salvaje para romper una piedra de tal grosor.

Conjunto de estalactitas en la sala principal, que asemejan un órgano.
Aquí también se han roto la mayoría de las puntas de las estalactitas.

De la gran sala parte otro ramal que se adentra aún más y lleva a otros rincones interesantes. En uno de ellos, existe una estrecha gatera, por la que hay que reptar para acceder. No apto para claustrofóbicos o individuos con exceso de carnes. Nos conducirá a una parte de la cueva menos transitada y por ello en mejor estado de conservación, aunque también expoliada.

Mapa de la cueva
La entrada se encuentra cerca de la sección A-A'.
Su exploración es relativamente accesible hasta llegar a la gatera (creo que es en la sección C-C').

Para haceros una idea de lo que hay en el interior, os dejo este vídeo de un pequeño reportaje que en su día hizo Castilla-La Mancha TV.



Si decides visitar la cueva, mejor seguir estas recomendaciones:

- Nunca acceder solos: Si sufrís un percance allí dentro nadie os podría ayudar.
- Llevad varias linternas (y repuestos). La oscuridad es total. Una linterna poco potente o un móvil es básicamente inútil. Quedarse sin luz sería fatal. Encontrar la salida sería imposible...
- Conviene dejar dicho a personas de confianza dónde vais a ir.
- Calzado y ropa adecuada: El suelo es resbaladizo en algunas zonas.
- Respetad la cueva y el entorno. No rompáis nada. Ya bastante deterioro ha sufrido. Lo que la naturaleza construyó durante miles de años, el desaprensivo de turno lo destrozó en unos segundos.

Adicionalmente, os dejo un par de documentos en el que tenéis más información sobre la cueva:

- Un artículo de Javier García Bresó, publicado en el número 11 de la revista Añil (1996):


- Un estudio de T. Torres Perezhidalgo de 1971, sobre un pequeño yacimiento de fauna fósil encontrado en la cueva.



Según el estudio anterior, a pesar de haberse encontrado fauna fósil en el interior, se sospecha que llegó hasta allí arrastrada por alguna corriente de agua, pues no se han encontrado evidencias de actividad humana prehistórica en la cueva.

Es una lástima que lugares como este, sean poco conocidos y tengan un acceso complicado, lo cual, en ocasiones, en lugar de ayudar a su preservación, sirve para que los expoliadores campen a sus anchas. Lo que no se conoce, no se valora. O como decía Machado: "Todo lo que se ignora, se desprecia".

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Comentarios

  1. Respuestas
    1. Pues aún sorprende más desde dentro, porque las fotos que he colgado no le hacen justicia. Habría que llevar un buena cámara y potentes focos para sacar fotos decentes. Sorprenden sus dimensiones, siendo (creo) que la mayor de la provincia.

      En el video que he colgado se ve algo mejor, pero lo recomendable es entrar y verlo por uno mismo.

      Como siempre, muy agradecido por su comentario, señor Eze.

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  2. Te había perdido el rastro. Me alegra ver que nos sigues regalando tus publicaciones. Pienso visitar la cueva esta próxima primavera. Ahora con la duda de si seré capaz, o me dará un poco de claustrofobia al ver la entrada. Aunque estoy convencida, que mi curiosidad, me hará vencerla.
    Como siempre, un placer leerte. Muchas gracias

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    1. Hola Olaya. La alegría es mía de verte de nuevo por aquí. Si decides visitarla, aconsejo contar con sobrada luz para vencer el miedo, así que hazte con potentes linternas. Espero que después vengas por aquí a contar la experiencia.

      Gracias por leerme.

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  3. Acceso infernal, ni una sola indicación, y después de todo lo que pasas hasta llegar allí, no me rece la pena, no volveré y tampoco lo recomiendo. Y encima después de estar perdido, sin cobertura alguna, pides ayuda o alguna información y te responde el amable de turno: " que te informes antes de ir, porque no puedes pasar por las fincas" gracias por tu ayuda amigo.

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    1. Lamento su experiencia señor/a Unknown.

      Noto cierto sarcasmo en su agradecimiento (que no sé si irá por este blog o por el "amable de turno" al que pidió ayuda). Pero efectivamente, el lugar a día de hoy no tiene ninguna indicación: Es una cueva perdida en el monte de difícil acceso, no una atracción turística.

      La diferencia entre pasar un día estupendo disfrutando de la naturaleza o de sufrir una mala y desagradable experiencia puede estar precisamente en la preparación de la excursión. Preparación que recae exclusivamente en quien vaya a realizarla. Esta página no es una guía infalible para visitas turísticas, sino que simplemente se limita a dar a conocer un lugar y/o su historia. A pesar de ello, algunas pistas hay en el texto (copio literal):
      - "Se trata de una cueva que no está preparada para el turismo, por su ubicación, por su acceso y por la visita a su interior."
      - "Se halla perdida en el monte."
      - "Para llegar a ella hay que hacerlo caminando varios kilómetros."
      - "Si no se conoce el terreno conviene ayudarse de un GPS de montaña."
      - "La visita se hace por tu cuenta y riesgo."
      - "No tomar ciertas precauciones puede ser fatal."
      - "Precaución ante todo."
      - "Nunca acceder solos."
      - "Calzado y ropa adecuados."

      Y en ningún momento comento nada en el artículo sobre las fincas de alrededor. Conviene informarse según la ruta que se quiera seguir. Si después de leer todo esto decide aventurarse en el monte sin preparar la salida, pues una apacible excursión se puede convertir en una actividad de riesgo o desagradable.
      De hecho, no hace muchas semanas, la Guardia Civil tuvo que rescatar de la zona a un grupo de jóvenes que se desorientaron en las cercanías de la cueva, anocheció y acabaron perdidos, en una zona, como usted reseña, con escasa o nula cobertura para el móvil.

      Para la próxima vez, le recomiendo que prepare mejor la excursión teniendo en cuenta el lugar que vaya a visitar. No es lo mismo recorrer una cueva perdida en el monte sin indicaciones que ir a tomarse un refresco a la plaza Mayor de Almagro.

      Si se prepara convenientemente, la visita se puede hacer incluso con niños sin problema. No son pocos los grupos senderistas que han visitado la cueva.

      Si la cueva merece o no la pena, es algo muy subjetivo. Este blog simplemente presenta los lugares y las particularidades por las que creo que son especiales. Esta es de las cuevas más grandes de la provincia, con alto interés geológico. A mí me parece un lugar único en la provincia de Ciudad Real. Cada persona tiene unos gustos diferentes y la misma experiencia puede ser disfrutable para unos o una pérdida de tiempo para otros.

      No obstante, le agradezco mucho que haya contado aquí su experiencia.

      Un saludo.

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  4. En su día me envalentoné y me creía capaz de visitar la cueva. Pero...no fue así. Sentí temor.
    Aprovecho para decirte que no he entendido la queja de este lector. Me parece que explicas con muchísima claridad las dificiltades de acceso a la misma. Somos diversos y ello hace que a veces no comprendamos ciertas actitudes.
    Saludos.

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    1. Ciertos temores son algo muy personal, y para pasar un mal rato mejor no pasar si no se está seguro. Espero que puedas vencerlos en una próxima ocasión y disfrutar de la aventura.
      Gracias Felicitad, por venir a contar tu experiencia.

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  5. Estimado bloguero.
    Afirmar que muchas estalagmitas están seccionadas por la acción del hombres además de atrevido, puede inducir a error. La mayoría de ellas y debido a su dureza y altura es prácticamente imposible el acceso por parte de los desalmados a no ser que usen medios de altura e instrumental de corte. En muchos blogs y artículos se menciona que la cueva de los Muñecos está muy expoliada con numerosas estalagmitas y otros espeleotemas arrancados por el hombre, algo difícil de creer pero que no debe reproducirse sin antes consultar las voces de los expertos sobre el tema.

    Una cueva es algo en continuo proceso tanto de formación como de destrucción sin necesidad de intervenir el humano, estos procesos le llevan a un estado de equilibrio. Por ejemplo para formarse esa magnífica primera sala y las demás y para que sus bóvedas se regularicen deben ocurrir desmoronamientos del techo que al caer al suelo y sin el conocimiento preciso, pueden parecer destrozos.

    En las cuevas kársticas encontramos procesos mecánicos y químicos que la van alterando. En los geoquímicos el más importante es la concentración de CO2 que afecta a la velocidad en que se forman los espeleotemas, junto a la humedad, minerales, etc.
    Para los mecánicos encontramos las presiones que soportan las paredes y techo de la cueva con el subsuelo que tiene por encima y a los laterales, pero el clima es un factor que afecta directamente a lo que expresa en su artículo como "muchas de las piedras aparecen mutiladas por la mano del hombre". La razón es muy sencilla. El clima. Este factor interviene de tal manera que puede cambiar las condiciones geoquímicas, de temperatura, físicas y biológicas de la cueva.

    En las grutas de Orgnac y Bedeilhac, por ejemplo, hay estalagmitas caídas en el suelo dejando el techo con una apariencia similar a lo que denuncian como destrozo del hombre en Abenójar. La razón es que la acumulación del sustrato que forma la estalagmita es diferente por la cantidad de agua que penetra en la cueva y en un momento determinado al disolverse este sustrato las estalagmitas caen, hecho que generalmente coincide con un periodo de sequía, digamos que la estalagmita no recibe el necesario aporte de sustrato y se desprende. La muestra es que muchas de las "arrancadas" están a un nivel similar, quiere decirse que cayeron hace muchas décadas prácticamente a la vez.

    Hay mucha bibliografía, especialmente de origen francés que explica estos fenómenos, Cavaillé es uno de los autores básicos a leer. Espero que esta explicación se tenga en cuenta para futuras afirmaciones sobre el expolio de la cuerva, que por otra parte, no niego que haya existido, algo difícil de comprender.

    Un saludo

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    1. Releyendo mi comentario una vez publicado donde digo estalagmita quiero decir estalagtita que son las que se forman desde el techo, no desde el suelo. Un pequeño desliz.

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    2. Tiene usted toda la razón, pues la cueva está "viva" geológicamente hablando.
      No se puede afirmar de toda espeleotema rota que haya sido vandalizada.

      Pero a pesar de ello, si visita la cueva se dará cuenta en primera persona de lo que expongo en este artículo. Por ejemplo, un botellín de cerveza o una pintada de "spray" sobre una espeleotema no es fruto de un proceso geológico. También encontrará estalactitas que por su rotura y estado se aprecia que fueron seccionadas "muy recientemente" (desde el punto de vista geológico).

      Muchas gracias David por sus aclaraciones.

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  6. Desde al año 1990 que la visité por primera vez voy con cierta regularidad y efectivamente, la mala salud social acompañado por la falta de un mínimo de comportamiento se refleja en las pintadas, raspaduras en la roca y demás actos vandálicos. Lástima porque terminarán prohibiendo el acceso libre por culpa de estos descerebrados.

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    1. Esperemos que la divulgación sirva para crear conciencia y sepamos conservarla como es debido.
      Muchas gracias por comentar, David.

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  7. Hola
    Había escuchado hace unos meses que el propietario de la finca por la que hay que pasar para llegar a la cueva había puesto un candado en una de las puertas, bloqueando el acceso.

    ¿Alguien que haya estado por allí recientemente puede confirmarlo?

    Gracias

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    1. Hola Miguel.
      Desde el blog no puedo confirmar el estado actual para acceder a la cueva. Conviene informarse antes de la visita.
      Saludos y gracias por comentar.

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    2. Hola! Me encantó la experiencia!
      Volveremos a ir mejor mejor equipados!
      Dentro encontramos muchas velas pequeña en los salientes.

      Estuve hace dos semanas y no tienen candado, incluso en la puerta de arriba tiene muchas bolsas colgadas para que nadie rompa la alambradas y vea que la puerta esta ahí

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    3. Hola D. No.

      Me alegro que haya disfrutado del lugar. Gracias por su comentario y la información actualizada.

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  8. He visitado la cueva muchas veces, desde que era pequeña, cuando mi padre nos ataba con una cuerda porque el suelo era mucho más resbaladizo que ahora. Siempre me ha dolido ver los trozos de estalactitas y estalagmitas rotos por doquier, algunos grupos de niños se dedicaban a tirar trozos haciendo puntería sobre los murciélagos o sobre las formaciones del techo. Pero desde hace unos años, alguien, en mi opinión ignorante y con más delito que esos grupos de niños, se dedica a poner velas por toda la cueva, llenando de cera las paredes y DE CIENTOS DE RECIPIENTES DE ALUMINIO el suelo y cualquier hueco que le sirva de repisa. Creo que se debería limpiar la basura de la cueva y poner al menos alguna recomendación en la entrada, por ejemplo, que no se toquen con las manos todas las formaciones que quedan al alcance, porque solo con tocarlas pueden alterarse y por supuesto no introducir elementos como VELAS, comida, ...

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    1. En este sentido, al final casi todo se reduce a concienciación, civismo y tener sentido común, cosa que en no pocas ocasiones escasea. No debería dejarse nada dentro de la cueva. Si una vela ya genera residuo (cera y su recipiente de aluminio) me imagino lo que pueden hacer cientos de ellas.
      Es una pena la de guarrería y basura que es capaz de ir dejando la gente a su paso, tanto en la cueva como en el campo en general.
      Un cartel informativo puede ayudar, pero hay un interminable camino por recorrer en este aspecto.
      Gracias por comentar.

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